(in spagnolo e in italiano)
18 de diciembre de 2008
Comunicado de prensa
Hoy, el día en el que la Iglesia de la Santa Cruz fue declarada monumento histórico y la ex Plaza de Armas de la ex ESMA cambia su nombre por el de “Declaración Universal de los Derechos Humanos", la Sala II de la Cámara Nacional de Casación Penal dispuso la libertad de más de una decena de acusados por los crímenes de lesa humanidad cometidos en la ESMA durante la última dictadura militar. Esta resolución deja al descubierto la indolencia de los funcionarios judiciales en el camino por obtener verdad y justicia.
La liberación de los acusados es posible porque las distintas instancias de la justicia han demorado en forma injustificada los procesos, dilatando la posibilidad de alcanzar la instancia de los juicios orales y públicos. Desde la reapertura de las causas en 2001, ni los jueces de instrucción ni los fiscales, salvando contadas excepciones, han mostrado pericia y agilidad en las investigaciones de los casos por lo que éstas se han prolongado en forma irrazonable. Por su parte, la Cámara de Casación obstruyó durante años la continuidad de las causas, incluyendo algunas resoluciones que aún hoy siguen pendientes y que impiden el inicio de los juicios en algunas jurisdicciones del país.
A siete años de la reapertura de las causas, persiste la incapacidad de los funcionarios judiciales responsables de diseñar un plan estratégico que garantice a las víctimas y a la sociedad en su conjunto la realización del proceso de verdad y justicia en el marco del respeto de las garantías.
A tres décadas del golpe, el Estado tiene la obligación de ser diligente en la investigación, búsqueda de prófugos y protección de testigos y no puede descansar solamente en la actividad y persistencia de las querellas y del movimiento de derechos humanos. Por eso, una vez más instamos a que el Estado garantice la protección de los testigos y personas vinculadas a estos procesos e implemente una estrategia de persecución y juzgamiento de estos crímenes gravísimos. La ineficacia del sistema de justicia pone al Estado argentino en una situación de responsabilidad internacional por violar convenciones de derechos humanos, por no garantizar ni a los familiares y la sociedad la sanción de los responsables de los delitos de lesa humanidad ni a los imputados un juicio en un plazo razonable.
La libertad de los acusados durante el proceso penal no conlleva impunidad. A treinta años del Terrorismo de Estado, impunidad es que, por desidia, indolencia o complicidad, la justicia argentina aún no los haya condenado.
Abuelas de Plaza de Mayo
CELS
Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas
Fundación Memoria Histórica y Social Argentina
H.I.J.O.S.
Madres de Plaza de Mayo –Línea Fundadora
Adhieren
Madres de Plaza de Mayo de La Plata
Horacio Méndez Carreras
—-
storico
E l’ex Piazza D’armi dell’ex ESMA cambia il proprio nome per “Dichiarazione
Universale dei Diritti Umani”,
la Sala II della Cámara Nacional de Casación Penal ha liberato una dozzina
di indagati accusati di crimini contro l’umanità commessi all’ESMA durante l’
ultima dittatura militare. Questa risoluzione prova l’indulgenza da parte dei
funzionari giuridici sulla strada della verità e la giustizia.
La libertà degli accusati è possibile perché diverse istanze hanno ritardato
i processi, senza alcuna giustificazione, ostacolando la possibilità di
raggiungere un verdetto nei processi pubblici. Da quando sono stati riaperti i
processi, nel 2001, né giudici né pubblici ministeri, tranne poche eccezioni,
hanno dimostrato furbizia e rapidità nelle investigazioni sui perché dei
ritardi. Da parte sua, la Cámara de Casación ha ostruito la continuità dei
processi, perfino l’esito di alcune risoluzioni che ancora oggi bloccano l’
inizio dei processi in alcuni tribunali del paese.
Dopo sette anni della riapertura dei processi, si prolunga l’incapacità di
alcuni funzionari giuridici responsabili del disegno di un piano strategico in
grado di assicurare alle vittime e alla società nel suo insieme la
realizzazione di un processo vero e giusto, nel rispetto delle garanzie
costituzionali.
Tre decenni dopo il golpe, lo stato argentino ha l’obbligo di essere rigoroso
nelle indagini, nella ricerca dei profughi, nella protezione dei testimoni, e
non può adagiarsi nelle attività di querelle e nei movimenti per i diritti
umani. Per questo, chiediamo un’altra volta che lo Stato si faccia garante
della protezione dei testimoni e delle persone implicate nei processi e coltivi
una politica di persecuzione e condanna di questi crimini gravissimi.
Le negligenze del sistema giudiziario mette lo stato argentino in una
situazione di responsabilità internazionale per violazione dei diritti umani,
perché non assicura né ai familiari né alla società pene per i responsabili dei
delitti contro l’umanità, tanto meno un processo in tempi ragionevoli per gli
imputati.
La libertà degli accusati durante il processo non significa impunità. Trent’
anni dopo il terrorismo di Stato, impunità vuol dire che per disinteresse,
indulgenza o complicità, la giustizia argentina ancora non ha condannato
nessuno.
Abuelas de Plaza de Mayo
CELS
Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas
Fundación Memoria Histórica y Social Argentina
H.I.J.O.S.
Madres de Plaza de Mayo –Línea Fundadora
Aderiscono
Madres de Plaza de Mayo de La Plata
Horacio Méndez Carreras